¿Ha sentido alguna vez vergüenza por alguna parte de su cuerpo?, ¿detectó algún defecto físico que, aunque sea imperceptible para los demás, no sale de su pensamiento? Usted podría estar sufriendo de Trastorno de Dismorfia Corporal (TDC), también conocido simplemente como dismorfia de cuerpo.

El trastorno dismórfico corporal (TDC) es un trastorno de salud mental que se caracteriza por una preocupación excesiva e irracional por uno o varios defectos percibidos en la apariencia física. A menudo, estos defectos son imperceptibles o mínimos para los demás, pero son vistos como significativamente anormales o desfigurados por la persona que sufre de TDC. 

Cuando esta preocupación es constante, puede llevar a la persona a evitar situaciones sociales, a tener dificultad para concentrarse y a experimentar ansiedad y depresión, lo que podría llevar al desarrollo de pensamientos suicidas si no se recibe una ayuda profesional a tiempo.

¿Cómo saber si sufro Trastorno de Dismorfia Corporal (TDC)?

Existen muchas señales que pueden indicar que usted sufre de dismorfia corporal. Hay que tener en cuenta que el TDC se clasifica como un trastorno de la percepción de la realidad, ya que las personas que lo padecen tienen una percepción distorsionada de su propia apariencia. 

Además, a menudo las personas con TDC se comparan constantemente con los demás y se sienten insatisfechas con su apariencia, incluso cuando los demás les dicen que están bien. Esta insatisfacción puede llevar a comportamientos obsesivos, como el uso excesivo de maquillaje o la realización de cirugías estéticas innecesarias.

Este test ha sido diseñado para evaluar la presencia de síntomas relacionados con el trastorno dismórfico corporal (TDC). Consiste en una serie de preguntas sobre la preocupación de la apariencia física, los comportamientos obsesivos relacionados con la apariencia y el impacto de estos síntomas en la calidad de vida. 

Los resultados de este test deben ser interpretados por un profesional de la salud mental y deben ser utilizados como una herramienta para ayudar a determinar el tratamiento adecuado. Responda a cada una de las preguntas con un sí o con un no:

  1. ¿Se preocupa usted excesivamente por algún aspecto de su apariencia física?

 

  1. ¿Se siente insatisfecho con su apariencia física a pesar de los cumplidos de los demás?

 

  1. ¿Evita situaciones sociales debido a su preocupación por su apariencia?

 

  1. ¿Se compara constantemente con los demás en relación con su apariencia?

 

  1. ¿Ha realizado cambios significativos en su apariencia física (como cirugías estéticas o cambios en su dieta/ejercicio) debido a su preocupación por su apariencia?

 

  1. ¿Ha desarrollado sentimientos de ansiedad o depresión debido a su preocupación por su apariencia física?

 

  1. ¿Siente que su preocupación por su apariencia física afecta su capacidad para concentrarse en otras áreas de su vida, como por ejemplo el trabajo o los estudios?

 

  1. ¿Considera que su preocupación por su apariencia física afecta su relación con los demás?

 

  1. ¿Ha intentado cambiar u ocultar algún aspecto de su apariencia física mediante maquillaje u otros medios?

 

  1. ¿Ha recibido tratamiento o ayuda por algún tipo de preocupación relacionada con su apariencia física anteriormente?

Si la mayoría de las respuestas a estas preguntas son “Sí”, puede ser indicativo de que existe un posible caso de Trastorno de Dismorfia Corporal (TDC). Sin embargo, como se menciona anteriormente, es necesaria la intervención de un profesional de la salud, quien pueda brindar un diagnóstico certero y un tratamiento adecuado para garantizar su salud y bienestar mental.

¿Qué hacer si existen sospechas de Trastorno Dismórfico Corporal (TDC)?

En caso que los resultados del test despierten sospechas sobre un posible caso de dismorfia de cuerpo, es importante buscar ayuda. El primer paso es hablar con un médico general o un médico de atención primaria, quien puede realizar una evaluación física para descartar cualquier problema médico subyacente y pueda referir el caso a un especialista en salud mental, si es necesario.

Por lo general, el tratamiento del Trastorno Dismórfico Corporal (TDC) puede incluir terapia cognitivo-conductual (TCC) o terapia psicológica. La TCC se centra en ayudar al paciente a identificar y cambiar los patrones de pensamiento negativos y comportamientos que contribuyen a su preocupación por su apariencia física, mientras que la terapia psicológica puede ayudar a comprender las causas subyacentes de la preocupación y a desarrollar estrategias para manejarla.